Hablemos claro: no eres tú, es la primavera
Cambios bruscos de temperatura, menos horas de sueño, alergias, desajustes hormonales y un exceso de expectativas sociales. La primavera lo revuelve todo, también tu energía. Si en estos días te sientes más cansado, irritable o simplemente "desenchufado", tranquilo: no eres el único.
Lo que muchos llaman "astenia primaveral" afecta a entre un 40% y un 60% de la población en España durante los meses de marzo y abril. En los hombres, este bajón se suele manifestar con fatiga, falta de concentración, apatía y una percepción más crítica de la propia imagen.

Las causas (más comunes y más ocultas) del bajón primaveral
Cambios de luz y temperatura
El cuerpo se autorregula con la luz solar. Al aumentar las horas de luz, se alteran los niveles de melatonina (hormona del sueño) y serotonina (la de la motivación y el placer). Resultado: sueño interrumpido y estados de ánimo más irregulares.
Presión estética y social
Empieza el buen tiempo y con él, la exposición. Hay quien se siente obligado a estar en forma, a verse bien, a tener una "actitud de primavera". Pero cuando el cuerpo y la cabeza no acompañan, llega la frustración.
Micronutrientes bajo mínimos
Tras el invierno, es frecuente que los niveles de vitamina D, hierro y magnesio estén bajos. Esto se traduce en falta de energía, palidez y menor tolerancia al estrés.

Tres frentes para recuperar tu energía (y tu versión más atractiva)
1. Actitud: ponle nombre a lo que sientes
Sentirte raro, apagado o menos tú mismo no es debilidad, es biología. Entender cómo funcionan tus ritmos internos es el primer paso para tener el control. No lo fuerces: reintégrate poco a poco en rutinas sociales, busca sol en lugar de sombra, recupera alguna actividad que te motive.
2. Cuerpo: muévelo, pero con cabeza
No hace falta que corras una media maratón. Con salir 30 minutos a caminar al sol (sin gafas oscuras, para que el cerebro capte bien la luz), ya activas tus niveles de serotonina. El movimiento genera endorfinas, mejora el foco mental y también la percepción de ti mismo.
3. Imagen: cuídala sin obsesionarte
Tu aspecto también influye en tu estado de ánimo. La piel apagada, los ojos hinchados o el pelo sin fuerza pueden hacerte sentir peor. Cuidar tu imagen no es vanidad: es una forma de comunicarle a tu cerebro que estás en control, que estás presente.

Cuida tu piel (y tu pelo) como un hombre FETĒN
No hablamos de tratamientos eternos ni de rituales complicados. Hablamos de:
En resumen: energía no es solo lo que sientes, es lo que proyectas
La primavera puede tumbarte... o puede ser tu excusa para resetear cuerpo, mente y piel. Empieza por reconocer lo que sientes, actúvate poco a poco, y recupérate desde dentro y desde fuera.
Y si necesitas ayuda para empezar, ya sabes dónde encontrarla. En FETĒN, lo nuestro no es cosmética. Es cuidado masculino con sentido.
Descubre tu rutina de primavera en FETĒN
Piel y energía: por qué te sientes más apagado en primavera (y cómo remediarlo)
Hablemos claro: no eres tú, es la primavera
Cambios bruscos de temperatura, menos horas de sueño, alergias, desajustes hormonales y un exceso de expectativas sociales. La primavera lo revuelve todo, también tu energía. Si en estos días te sientes más cansado, irritable o simplemente "desenchufado", tranquilo: no eres el único.
Lo que muchos llaman "astenia primaveral" afecta a entre un 40% y un 60% de la población en España durante los meses de marzo y abril. En los hombres, este bajón se suele manifestar con fatiga, falta de concentración, apatía y una percepción más crítica de la propia imagen.
Las causas (más comunes y más ocultas) del bajón primaveral
Cambios de luz y temperatura
El cuerpo se autorregula con la luz solar. Al aumentar las horas de luz, se alteran los niveles de melatonina (hormona del sueño) y serotonina (la de la motivación y el placer). Resultado: sueño interrumpido y estados de ánimo más irregulares.
Presión estética y social
Empieza el buen tiempo y con él, la exposición. Hay quien se siente obligado a estar en forma, a verse bien, a tener una "actitud de primavera". Pero cuando el cuerpo y la cabeza no acompañan, llega la frustración.
Micronutrientes bajo mínimos
Tras el invierno, es frecuente que los niveles de vitamina D, hierro y magnesio estén bajos. Esto se traduce en falta de energía, palidez y menor tolerancia al estrés.
Tres frentes para recuperar tu energía (y tu versión más atractiva)
1. Actitud: ponle nombre a lo que sientes
Sentirte raro, apagado o menos tú mismo no es debilidad, es biología. Entender cómo funcionan tus ritmos internos es el primer paso para tener el control. No lo fuerces: reintégrate poco a poco en rutinas sociales, busca sol en lugar de sombra, recupera alguna actividad que te motive.
2. Cuerpo: muévelo, pero con cabeza
No hace falta que corras una media maratón. Con salir 30 minutos a caminar al sol (sin gafas oscuras, para que el cerebro capte bien la luz), ya activas tus niveles de serotonina. El movimiento genera endorfinas, mejora el foco mental y también la percepción de ti mismo.
3. Imagen: cuídala sin obsesionarte
Tu aspecto también influye en tu estado de ánimo. La piel apagada, los ojos hinchados o el pelo sin fuerza pueden hacerte sentir peor. Cuidar tu imagen no es vanidad: es una forma de comunicarle a tu cerebro que estás en control, que estás presente.
Cuida tu piel (y tu pelo) como un hombre FETĒN
No hablamos de tratamientos eternos ni de rituales complicados. Hablamos de:
Exfoliante Limpiador Facial BIO: elimina células muertas y devuelve luz al rostro, solo de 1 a 2 veces por semana.
Sérum de Vitamina C: antioxidante, energizante y esencial para verte bien con efecto "buena cara".
Contorno de Ojos Antiojeras: desinflama, mejora el tono y reduce la sensación de fatiga en la mirada.
Crema Hidratante Facial Antiarrugas: hidrata sin brillos ni grasa, unificando la piel y reduciendo poros y arrugas.
Champú Anticaída y Acondicionador: ideal si notas que el estrés ha hecho estragos en tu pelo.
En resumen: energía no es solo lo que sientes, es lo que proyectas
La primavera puede tumbarte... o puede ser tu excusa para resetear cuerpo, mente y piel. Empieza por reconocer lo que sientes, actúvate poco a poco, y recupérate desde dentro y desde fuera.
Y si necesitas ayuda para empezar, ya sabes dónde encontrarla. En FETĒN, lo nuestro no es cosmética. Es cuidado masculino con sentido.
Descubre tu rutina de primavera en FETĒN